Reflexiones sobre el amor

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Tomado del precioso BLOG de Guerrera de la Luz, una genial reflexión sobre el amor, según lo define el apóstol Pablo, en la  primera carta que dirige a los corintios

1ª Corintios, 13

EL AMOR

ES PACIENTE:

Perdón Señor, por todas mis impaciencias. Perdón por mi rebeldía contra tu Santa Voluntad. Mis impaciencias con los hombres. Mis impaciencias conla adversidad. Mi rechazo sistemático del dolor, del sufrimiento, de la incomodidad: mi tributo al hedonismo, mi búsqueda contínua del placer.

ES SERVICIAL:

Perdón Señor, por no entender la vida como servicio a Ti en mis hermanos. Por no poner mis talentos y mis recursos a disposición de los demás. Por mi avaricia a la hora de dar mi tiempo, mi dinero, mis posibilidades. Por mi pereza, mi inactividad, mi falta de compromiso, mi deserción de la lucha en el momento crucial. Perdón por tantos pecados de omisión. Por mi falta de identificación con los necesitados, los marginados, con los que sufren en el cuerpo y en el espíritu.


NO ES ENVIDIOSO:

Perdón Señor, por mi envidia, mi afán de compararme con los que tienen más que yo, con quienes son mejores. Perdón por mi dolor ante el bien ajeno, mi empeño en ser más que los otros, en quedar mejor, en ser más estimado.


NO ES JACTANCIOSO:

Perdón Señor, por mi vanidad, mi presunción, mi vida de apariencias, mi superficialidad. Perdón por mis palabras altaneras, mi autoritarismo, mi despotismo.


NO SE ENGRÍE:

Perdón Señor, por mi soberbia, mi culto a mí misma, mi falta de humildad ante los hombres, ante Ti. Por constituirme en el centro de mi pequeño mundo; por tener en mí y no en Ti el centro de gravedad. Por no adoptar la postura auténtica de pecador necesitado de tu Perdón y tu Misericordia y deudor ante los hombres.


NO BUSCA SU INTERÉS:

Perdón Señor, por vivir para mí misma sin preocupación por los demás, por mi empeño desmedido en acrecentar lo mío, mis intereses, mi dinero, mi instalación en este mundo, mi placer, mi comodidad.


NO SE IRRITA:

Perdón Señor, por mi falta de mansedumbre, mis enfados, mis ataques de ira, mi falta de dominio y control, mis indignaciones y mis salidas de tono.


NO TOMA EN CUENTA EL MAL:

Perdón Señor, por insistencia en fijarme en lo malo, en revolverme en el mal, manifestar los defectos ajenos. Perdón por la fijación por las críticas, las detracciones, la calumnia, la exageración del mal ajeno, la propensión a admitir lo malo en los demás, a juzgar severamente, a condenar a mi hermano, a malinterpretar sus circunstancias.


NO SE ALEGRA DE LA INJUSTICIA:

Perdón Señor, por mi connivencia con el mal, por ceder cuando me conviene, por transigir por interés o comodidad, por mis pecados contra la justicia. Por no dar a cada uno lo suyo, por no darte a Ti el puesto que te corresponde en mi vida, por mi falta de piedad, oración y práctica de sacramentos, por mi falta de respeto a lo ajeno, por mi falta de cumplimiento del deber.


SE ALEGRA DE LA VERDAD:

Perdón Señor, por mis faltas de sinceridad. Mis mentiras, mi hipocresía, mi falta de apertura a la verdad y a sus tremendas consecuencias, mis infidelidades a Ti y a mis hermanos, mi falta de lealtad.


TODO LO EXCUSA:

Perdón Señor, por mi resistencia al perdón, por mi rencor, mi recuerdo de los males recibidos, mi dificultad para olvidar.


TODO LO ESPERA:

Perdón Señor, por mi falta de confianza, por desconfiar de Ti, por desesperar de los hombres, por mi susceptibilidad, por la facilidad de sentirme herido.


TODO LO SOPORTA:

Perdón Señor, por mi cansancio, mi desgana, mi apatía, mi aburrimiento, mi decepción, mi desaliento, mi facilidad de desistir, y por ponerme de espaldas.


LA CARIDAD NO ACABA NUNCA:

Perdón Señor, porque aún no hemos empezado a AMAR de verdad.

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